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¿Por qué utilizar impresoras térmicas?
Cuando invierte en un nuevo equipo, ¿elige un producto que puede hacer un poco de todo, o uno que destaca en su función? Las impresoras térmicas están diseñadas para producir etiquetas en una multitud de entornos de trabajo. Los modelos industriales permiten una impresión de alta calidad y un ciclo de vida duradero en entornos hostiles de fabricación. Además, minimizan el tiempo de mantenimiento y solución de problemas tanto para los usuarios como para el equipo de soporte de TI. Y simplifican la integración con redes empresariales, sistemas de equipo host y aplicaciones de software.
Estas funciones hacen que las impresoras térmicas dedicadas sean altamente rentables. Por ello, su empleo está recomendado en entornos como la fabricación de muebles, colchones, empresas de logística y almacenes.
Impresoras términas vs. modelos láser y de inyección:
En relación a la impresión de etiquetas para uso industrial, las impresoras térmicas tienen varias ventajas distintivas en comparación con los modelos láser y de inyección de tinta.
Calidad del código de barras.
Para que los códigos de barras sean legibles, las barras y espacios se deben producir con especificaciones de anchura precisas. También han de ofrecer un contraste adecuado. Las impresoras térmicas producen imágenes muy precisas, razón fundamental por la cual la tecnología térmica es la más utilizada para el etiquetado.
Los códigos de barras producidos en impresoras láser y de inyección suelen verse bien al ojo humano. Sin embargo, muchas veces no son legibles por los escáneres de códigos de barras debido a difuminados, bordes redondeados, marcas, etc.
Velocidad
Las impresoras térmicas con fines específicos por lo general se destacan desde la primera etiqueta impresa por el rendimiento del tiempo de impresión total. Esto se debe a que están optimizadas para imprimir etiquetas en lugar de documentos, poseen compatibilidad nativa para los formatos de códigos de barras, y pueden imprimir formatos de etiquetas de uso común.
Las métricas comunes de impresión en cuanto a velocidad de páginas por minuto (ppm) o pulgadas por segundo (pps) no representan una buena medida de velocidad.
Al comparar las impresoras de etiquetas, es importante medir el tiempo de la primera etiqueta de salida. Esta se mide con el tiempo transcurrido desde que un usuario presiona «imprimir» hasta que la etiqueta está lista para utilizar.
Se debe evaluar otra métrica de tiempo total de impresión, si las operaciones indican que los trabajadores generan múltiples etiquetas de forma simultánea. Algunas impresoras requieren una pausa entre cada etiqueta producida para procesar el próximo trabajo de impresión. Otras, en cambio, pueden imprimir de forma continua una vez que comienzan a salir.
Compatibilidad con el consumible.
Cuando se utilizan impresoras láser o de inyección, el consumible para la etiqueta utilizado por lo general se basa en aquello que la impresora puede aceptar. No se tiene en cuenta qué material es mejor para el artículo que se debe etiquetar, ni sus condiciones de producción o almacenamiento.
La exposición a altas temperaturas, humedad, vapor, químicos y otras condiciones comunes en la fabricación pueden causar que las etiquetas se destiñan o disuelvan. Las impresoras térmicas para etiquetas están diseñadas para admitir un stock de etiquetas de poliéster y otros materiales que causarían inconvenientes en otras impresoras.
Coste del consumible.
Los consumibles para etiquetas y el papel térmico por lo general cuestan menos que el consumible comparable para impresoras láser y de inyección de tinta.
Además, las impresoras térmicas desperdician menos, ya que las impresoras láser y de inyección no pueden crear etiquetas de forma individual. Se requiere cargar una hoja completa de consumibles, incluso si solo se requiere una. El resto de la hoja se puede desperdiciar o volver a cargar.
Esto requiere pasos adicionales: volver a cargar, dirigir la impresora para imprimir las etiquetas restantes, etc., excepto en los casos de apoyo donde las etiquetas ya han sido separadas.
Flexibilidad en la instalación.
Las impresoras térmicas se pueden instalar en el punto de producción debido a que son compactas y duraderas para utilizar en fábrica. Hacen que los trabajadores sean más productivos, ya que minimizan la distancia recorrida y el tiempo utilizado para recoger la impresión resultante.
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